Si conoces las partes de un vehículo y cada una de las piezas que permiten el funcionamiento correcto de este, es muy probable que sepas qué es o hayas escuchado hablar alguna vez de la correa de distribución, un objeto importante en la mecánica de un vehículo y que muchas veces puede causarnos algunos problemas.
Si no sabes lo que es una correa de distribución, o simplemente no has escuchado hablar de esta herramienta antes, entonces llegaste al lugar indicado. En este artículo te estaremos hablando acerca de esta importante pieza vehicular, para que entiendas muy bien su funcionamiento.
Así que si quieres aprender todo lo necesario sobre la correa de distribución, o si necesitas cambiarla pero no sabes cómo, en este artículo encontrarás toda la información que necesitas.
¿Qué es una correa de distribución?
La correa de distribución es una especie de banda o faja dentada, que se identifica como uno de los métodos más simples y comunes de transmisión de energía mecánica entre las piezas de un motor o un sistema de distribución de cualquier tipo.
En los vehículos fabricados más recientemente, la correa de distribución es una correa de goma que sincroniza las acciones del árbol de levas y el cigüeñal para mantener las válvulas en movimiento de forma segura y el motor en marcha.
Sin embargo, en el caso de los vehículos más antiguos, la correa de distribución no es representada como una banda, sino simplemente como una cadena. Independientemente de la forma que adopte, el propósito es el mismo y es importante para el funcionamiento de tu vehículo.
¿Cómo funciona la correa de distribución?
El árbol de levas opera las válvulas del motor de un vehículo para dejar entrar y salir aire y gas, mientras que el cigüeñal mueve los pistones hacia arriba y hacia abajo. Estos dos sistemas deben operar en sincronización exacta o podrían ocurrir daños a las válvulas, pistones, motor u otras partes cercanas.
Aquí es entonces en donde entra el trabajo de la correa de distribución, la cual se encarga principalmente de asegurar que esta sincronización entre ambos sistemas y procesos ocurra manteniendo cada sistema girando a la velocidad correcta, sin ocasionar daños a otras piezas del vehículo o al motor en sí.
En algunos casos, y dependiendo del modelo del motor que utilice el vehículo, es posible que el mecanismo de este funcione con más de una correa de distribución, trabajando incluso con la bomba refrigerante y la bomba de aceite del motor.
La parte interior de la correa contiene dientes que corresponden a los engranajes. Los dientes crean fricción cuando la correa de distribución entra en contacto con el cigüeñal y las ruedas dentadas del árbol de levas.
Si los dientes están dañados, la correa de distribución puede hacer que el cigüeñal y el árbol de levas no estén sincronizados. Esto lanza la sincronización de la válvula y el pistón, lo que puede destruir las válvulas y los pistones.
Además, la correa de distribución también necesita un tensor para mantener la presión sobre la correa de distribución. El tensor puede ser accionado por resorte, activado por presión de aceite o ajustado manualmente. Los tensores garantizan que la correa de distribución proporcione suficiente tensión para mover todas las poleas que impulsan los componentes del motor.
¿Cuáles son los tipos de correa de distribución?
Como te hemos explicado en otros artículos de nuestra web, muchas de las piezas que posee un vehículo en su fabricación no son únicas, debido a que pueden existir más de un modelo de su tipo, cumpliendo con las diferentes características y necesidades de cada vehículo.
Para que tengas una idea, algunos de los principales tipos de correa de distribución que podemos diferenciar en este artículo son los siguientes:
- Tipo SV: Este sistema tiene las válvulas laterales al cilindro y el accionamiento de las válvulas se realiza a través del árbol de levas situado también en el bloque motor. Este sistema se dejó de utilizar porque provoca que la cámara de compresión sea mayor de lo normal, limitando el tamaño de la cabeza de la válvula debido al espacio disponible.
- Tipo OHV (OverHead Valve): Este sistema tiene el árbol de levas en el bloque motor (por debajo de los cilindros) y las válvulas en la culata. La principal ventaja de este sistema es que el movimiento de transmisión cigüeñal-árbol de levas se realiza directamente a través de dos piñones. Otra ventaja es el escaso mantenimiento gracias a su diseño.
- Tipo OHC (OverHead Cam): Este sistema es el más utilizado en la actualidad (marzo de 2019), ya que contiene tanto el árbol de levas como las válvulas en la misma culata.6 Su principal ventaja con respecto a los otros sistemas es el menor número de componentes entre el árbol de levas y las válvulas, haciendo que la apertura y cierre de válvulas sea más precisa.
Estos son los 3 tipos de correa de distribución que se pueden encontrar en el mercado, por lo que, si necesitas cambiarla en algún momento, es importante que sepas muy bien cuál de los tipos que te acabamos de mencionar en con la que trabaja tu vehículo.
Te recomendamos que, si no lo sabes, acudas a un mecánico profesional que pueda ayudarte a saber cuál es el tipo de correa de distribución que necesita tu vehículo, para que así puedas reemplazarla sin causar problemas mayores en el funcionamiento del motor.
¿Cuándo es bueno cambiar la correa de distribución?
Una de las características más importantes de las correas de distribución que no muchos suelen tener en cuenta, es que, debido a su constante movimiento giratorio que les da funcionamiento a las piezas fundamentales del motor, suelen desgastarse con facilidad.
Lo más preocupantes de esto es que una correa de distribución en mal estado puede llegar a causar grandes daños en tu vehículo, como por ejemplo en las válvulas y los pistones del motor, lo que impediría que este arranque con normalidad cuando lo vayas a encender.
Para evitar este tipo de problemas con la correa de distribución, hay varios temas de los que deberías estar atento para saber cuándo es necesario cambiar la correa de distribución de tu vehículo.
Por ejemplo, uno de los principales es el kilometraje que tenga acumulado. Este es indicado por el fabricante, quien te indicará cuál es el kilometraje máximo que puedes recorrer antes de que la correa de distribución requiera de un cambio para continuar con su funcionamiento.
Por lo general, el kilometraje máximo suele ubicarse entre los 60 y los 80 kilómetros. SI tu vehículo lleva un registro por encima de esta cantidad, lo más probable es que requiera de un cambio de correa de distribución muy pronto.
1 comentario en «¿Qué es y cómo funciona una correa de distribución?»
Los comentarios están cerrados.